domingo, 20 de julio de 2014

Presentación

Hola, abro esta entrada para presentar el blog. Aunque nunca me había planteado montar uno, la gran cantidad de salidas y maravillosas rutas que hago en moto merecen ser compartidas, un blog es un buen modo de poder llegar a la gente y que puedan disfrutar de las crónicas (o eso espero). Aunque la temática principal será la de crónicas moteras, dejo hueco para publicar otras entradas sobre temas varios, o análisis de artículos que adquiera... se trata de compartir mis impresiones y que esto pueda ayudar a otros.

¡Espero disfrutéis leyendo este blog tanto como yo escribiendo!


martes, 10 de junio de 2014

Ruta Costa Azul y Provenza: Día 03

Día 03: Martigues, Arlès, Baux-de-Provence, Martigues: 150Km


Nos levantamos después de haber dormido bastante bien. El cansancio de la ruta del día anterior nos permitió evitar cualquier indicio de insomnio. Hoy tocaba turismo, minimizando el número de Km. El trato era visitar Arlès por la mañana, después de comer Baux-en-Provence, y volver por el parque natural de les Alpilles por carretera rural. Empezamos con un buen desayuno en Martigues (unas infusiones, galletas, y otros alimentos que llevábamos), y enfilamos por la N568 hacia Àrles. Esta carretera poco tiene de especial, aunque el recorrido es apacible, siempre con un paisaje lleno de viñedos, por supuesto!

Llegamos a Arlès sobre las 10H, con un calor que empezaba a arreciar... recordar que  enganchamos una ola de calor, y que la temperatura ya se acercaba a los 30ºC... aparcamos la moto justo delante de la oficina de turismo, recogemos el mapa de rigor, y nos adentramos en Arlès. Destacar que se puede hacer la visita completa caminando sin mayores problemas. 

Primer punto de ruta, la Place de la Republique, con un obelisco y el Ayuntamiento delante.


Continuamos con el Théâtre Antique, el cual es un teatro romano el cual en tiempos pasados constaba de una fortaleza... con el paso de los tiempos sus sillares se fueron expropiando para usarlos en otros edificios... quedando solo 2 columnas, las cuales se conocen como "las dos viudas". Aunque había un recorrido interior, éste era de pago, y se podía ver muy bien desde el exterior. Por lo que parece, esta ubicación se usa para montar actuaciones de ópera aprovechando la ambientación.


Siguiente punto, Les Arènes, uno de los monumentos romanos más grandes y mejor conservados de la Provenza. Un circo romano en toda regla, majestuoso por fuera... por dentro no podría decir, porque tampoco entramos (también había que pagar, y no teníamos tanto tiempo para aprovechar el desembolso).


Alrededor de Les Arènes, se encuentra un barrio lleno de callejuelas con casitas bajas, muy pintoresco y agradable para pasear.


Nuestro recorrido nos llevó hasta el Rhône, hay un paseo paralelo, por donde circulamos plácidamente. Habían barcos que hacían ruta a través del Río, interesante con más tiempo.


Realizada la visita, volvimos a la Avenida donde teníamos la moto. Antes de proseguir, aprovechamos para comer, nos empezamos a aclimatar al horario Francés, nos sentamos a las 12:30H... además estábamos al borde de derretirnos, la temperatura rondaba los 35ºC... Unas crujicocas y un refresco, en un bar que luego vimos estaba regentado por un matrimonio muy amable, casi al final del papeo nos dijo que era española y que hace años había desembarcado en Francia. Compramos agua en un Súper para rellenar la cantimplora, la pobre se había vaciado... qué calor que hacía!

Dejamos Arlès con una buena impresión, y nos vamos rumbo a Baux-de-Provence. Aquí la carretera se anima, efectivamente entramos en la Reserva de les Alpilles, una zona montañosa de piedra caliza, con un paisaje muy contrastado entre el blanco y reluciente de la roca y el verde de los árboles. Es una zona que tiene algunas regiones de olivos, con poca producción pero de muy alta calidad.

Llegamos a Les-Baux-de-Provence, bueno... al aparcamiento. No se puede acceder al pueblo, ya que es todo peatonal. No hay problema de aparcamiento, al menos en moto. Aparcamos en un espacio ya habilitado, y sin pagar ni un duro. Entramos al pueblo, desde abajo ya las vistas del mismo son impresionantes.


Una vez dentro, destaca el ambiente medieval de todas las calles. Lástima que esté tan sumamente explotado, con tiendas y restaurantes por todas partes... desmerece bastante.


De Les-Baux-de-Provence destaca la ciudadela, la fortaleza es impresionante, su envergadura y su posición en lo más alto de la colina la hacen una de las más importantes de la Provenza. Para entrar, hay que pagar entrada, aunque vale la pena. Destacar que en la mayoría de lugares de interés en Francia, las audioguías son gratuitas. Simplemente es necesario dejar un documento de identidad en préstamo, y al finalizar te lo devuelven.

Una parte de la fortaleza consta de una esplanada en lo alto de la colina, una posición defensiva muy importante al tener una vasta vista de la Provenza. Se muestran varios artilugios de guerra, tales como Hondas, Ballestas y sistemas de Asedio a fortalezas.





Con el calor que hacía, era para que te pasaran la guillotina, que sufrimiento!!


Una parte importante de la Fortaleza se encontraba excavada directamente sobre la roca, algunas zonas mostraban claramente la erosión del agua sobre la piedra caliza.



La visita había terminado, una experiencia buenísima! Tuvimos que meternos 4 litros de agua entre 2 para sobrevivir, pero aún con el sol y el calor (en Baux, hasta 38ºC marcaban los termómetros) nos lo pasamos genial. Tocaba la vuelta, haciendo una pequeña ruta por Les Alpilles.

Seguimos la misma carretera que nos había llevado hasta Baux, para enfilar dirección St. Rémy-de-Provence. La carretera sube algo más, pero enseguida baja, con una enlazada de curvas en S muy divertida. El asfalto está bastante bien, así que permite disfrutar de la carretera sin problema. Llegamos a St. Rémy, donde queríamos hacer una parada por el centro... estamos algo cansados, el calor ha hecho mella en nosotros. Por ello, decidimos parar en la entrada, donde se encuentra el Arco Triunfal de Glanum, restos griegos muy bien conservados.


Desde St. Remy nos movemos al este por la carretera D99, la cual es un tubo continuo de árboles. Muy apetecible después del calor pasado.


A medio camino tomamos el desvío por la D24, una carretera totalmente rural, asfaltada pero bastante rota. Estábamos en las mismas entrañas de Les Alpilles!! No se podía correr demasiado, ya que el suelo estaba muy cubierto por hojarasca de los pinos, era un tramo para tomárselo con calma y disfrutar tranquilamente de la naturaleza.


Llegamos a Martigues, reventados... preparamos una cena en la terraza del Hotel, un vinito, y a dormir!!



lunes, 9 de junio de 2014

Ruta Costa Azul y Provenza: Día 02

Día 02: Montpellier a Martigues: 250Km


Empieza el segundo día. El objetivo es llegar a Martigues, ciudad donde está ubicado el próximo Hotel. Aunque Martigues tiene cosas que ver, la localidad se seleccionó principalmente como punto base para establecernos con los bártulos y hacer turismo a zonas de interés cercanas.

En cualquier caso, teníamos un recorrido importante a realizar, el objetivo era recorrer el parque natural de la Camargue y pasar la tarde en la playa de Piemanson, la cual está cerca de la desembocadura del Río Rhône.

Desde Montpellier enfilamos hacia Aigues Mortes, localidad la cual destaca por tener una zona fortificada. Aunque parecía tener mucho que ver, íbamos con la equipación a Full y la moto hasta los topes, así que nos limitamos a hacer un recorrido pasando por dentro del pueblo. Una foto de ejemplo, en otra ocasión y con otras circunstancias tendremos el honor de conocerla mejor.


Pasada esta bonita localidad, vamos en busca de el parque de la Camargue. Una zona húmeda llena de lagunas y lagos, que además consta en su parte más interior de grandes campos de viña... mucha viña. Empezamos adentrándonos en el parque en busca de Saintes-Maries-de-la-Mer, una población turística de costa al Sur Oeste del parque. No había mucho que ver, pero era la excusa para recorrer las carreteras rurales (pero asfaltadas)... hay que tener la moto a punto para recorrerlas, y grabar todo con la cámara para no perder detalle.


Volvemos hacia el Norte de nuevo por la D570, campos y campos de viña aparecen... hasta encontrar el desvío por la D37, volviendo a enfilar las entrañas del parque por carretera rural... ¡Como nos gustan! Campos, lagunas, fauna (muchos caballos y gran variedad de aves)... encontramos de todo. Realmente este parque es una buena opción para recorrerlo por sus carreteras rurales a caballo o en bicicleta, efectivamente encontramos mucho turista bien en bicicleta, bien a caballo.


En medio del recorrido aparece a nuestra derecha el Êtang de Vaccarès, inmenso. ¿Hay hambre? Quizá toque tomar un tentempié frente a las increíbles vistas...


Continuamos el viaje bordeando el Êtang, desviándonos hacia el Sur. Próximo destino, la playa de Piemanson... pero antes mejor descargar en el Hotel, que íbamos cargados a tope. En este punto del recorrido existían 2 opciones: la primera era subir hasta Arlés para así bordear el Rhône y volver a bajar por el otro lado del río hasta Martigues (un montón de Km). La otra coger un Transbordador al Sur Este del parque, el Bac de Barcarin. Esto nos ahorraba mucho tiempo. Esto hicimos, llegamos al mediodía al Hotel. Descargamos y a zampar. Cerca del Hotel había un Supermercado, ideal para recargar provisiones, más visto que íbamos a estar 3 días en el mismo hotel. Una ensaladita y unas albóndigas nos satisfacen.


Ya comidos, sin la equipación completa de moto y sin equipaje, cogemos unas toallas, bañador, crema solar, las sombrillas... y deshacemos lo recorrido, vamos a la playa de Piemanson! Volvemos a escoger la opción transbordador para travesar el Rhône, y desde la otra orilla vamos hacia el sur por la Route de la Mer (D36D), una carretera que pasa por la Salin de Giraud, salina inmensa que se ve perfectamente desde la carretera).


La carretera es una pasada. Una carretera estrecha, con lagunas a ambos lados durante varios Km. Las vistas son espectaculares, un placer recorrer esta carretera en moto tranquilamente, sin prisa.


Y finalmente llegamos a la playa de Piemanson. No es grande... es inmensa. Tan grande que a pie de playa hay aparcadas cientos y cientos de Autocaravanas, furgonetas, etc. disfrutando de la playa a pocos metros del mar. ¡Hasta había gente que despegaba en parapente a motor desde la playa! La arena estaba muy bien, y el agua también. Aún algo fría en Junio, pero muy limpia.


Aparcar la moto tan cerca de la playa... no tiene precio.


El sol empieza a caer y toca volver a Martigues. Ha sido un día muy completo, y la tarde en la playa nos ha permitido relajarnos y disfrutar de una temperatura muy buena. Si las panorámicas a la ida eran buenas, a la vuelta con el Sol brillando más raso eran ya indescriptibles...


Otro viaje en Transbordador para acortar camino y solo queda Hotel, cenar algo acompañado de un vinito Francés, y a descansar.

domingo, 8 de junio de 2014

Ruta Costa Azul y Provenza: Día 01

Día 01: Barcelona a Montpellier: 450Km


Empezamos el día tempranito, ya que el trayecto es largo. Son muchos Km por carreteras lentas, pasando por muchos pueblos. Y hay que evitar el calor. La previsión es llegar a Montpellier para la hora de comer y así poder hacer turismo por la ciudad. En este caso solo estaremos una noche, al día siguiente el viaje prosigue hasta otro punto.

Partimos rumbo al interior de Catalunya, C-17 arriba hasta Manlleu, desde donde avanzamos hasta Olot por los Túnels de Bracons, C-37. Desde Olot dirección Figueres por la N-260. El día es buenísimo, y rutear por la N-260 bordeando la costa no tiene precio. Llançà, Colera, Portbou... y ahora sí, hemos cruzado la frontera! Estamos en tierras Francesas, aunque el paisaje no cambia demasiado: carretera revirada, alta, con vistas preciosas...






La carretera pasa a ser D914, aunque pasado Banyls-sur-Mer la dejamos, dicha carretera se mete hacia el interior y lo que interesa bordear la playa. Pasamos por Collioure, preciosa la Eglise Notre Dame des Anges desde la carretera.


Seguimos bordeando la costa, pasamos Saint-Cyprien plage (pueblo muy turístico y que ya en estas fechas estaba repleto... esta parte del viaje para otra vez, es evadible ya que no aporta nada a la ruta en moto). Pasada esta localidad nos encontramos con una interminable carretera, toda playa a la derecha y lago a la izquierda (Êtang de Canet), bastante apacible de recorrer.

Continuamos el trayecto, y aquí se trunca la idea de seguir por la costa, hasta en dos ocasiones. Hay obras en Le Barcarès dirección Port Leucate. Hay que bordear el inmenso Êtang de Leucate para reenganchar. Ahí continuamos, y nos adentramos en el Parque de la Narbonaisse, con lagunas por doquier. En esta zona está además la reserva africana de Sigean.



Respecto a la carretera nacional en la que nos encontrábamos (D6009), decidimos tomar un desvío por una carretera rural que nos lleva a Bages. Allí encontramos un parque a pie de lago (Êtang de Bages-Sigean) donde tomar un tentempié. El entorno, único. Esta zona es la más bella de todo el tramo, con mucho Km entre lagunas por carreteras apetecibles.




La moto se porta bien, ha descansado suficiente para continuar. Seguimos dejando atrás Bages por la misma carretera rural asfaltada, y nos volvemos a encontrar varios desvíos por obras: en Agde no podemos proseguir hasta Sète, así que hay que bordear de nuevo un lago inmenso, reenganchando en Fortignan, para enfilar el último tramo de lagunas hasta Montpellier. Ya cansados del largo viaje, descargamos en el Hotel F1 que teníamos reservado, ducha para atemperarse (hacía un calor brutal, el último tramo se hizo duro en ese aspecto) y a comer algo antes de hacer turismo por Montpellier. Me acerco a por algunas cosillas a un super cercano y... ¡a comer!

El trayecto hasta Montpellier por la costa nos ha gustado mucho, lástima que por obras nos hayamos perdido un par de tramos por lagunas muy prometedores, pero en media nos ha gustado mucho. Quizá del recorrido quitaría el paso por algunos pueblos que no aportaban nada, al tratarse de zonas muy turísticas que solo conseguían ralentizarnos y hacernos pasar calor.

Ahora toca hacer turismo, ya liberados de toda la equipación y el equipaje enfilamos con la moto hacia el Centro de Montpellier. Aquí en Francia respetan mucho a los moteros (se nota en carretera, donde ceden el paso hasta el punto de retirarse al arcén), pero también en ciudad, donde se puede aparcar en zonas céntricas sin amenaza de multa. Montpellier es una ciudad que se puede ver por encima en 1 día, tiene la mayoría de cosas que ver en el centro histórico.

Aparcamos cerca de la Place de la Comédie, donde se puede ver el edificio de la Opera de la Comédie, muy bonito. Justo delante empieza la plaza de la Comédie con la estatua de les 3 Grâces... que empalma con l'Esplanade Charles de Gaulle. En conjunto, es una zona de paseo muy confortable, con zonas de plaza mezcladas con parques repletos de árboles y arbustos para refugiarse del calor criminal que estaba haciendo (empezaba este mismo día una ola de calor que nos iba a azotar durante la mitad del viaje).



Este espacio termina en el palacio de congresos, un edificio de corte mucho más moderno en el cual no entramos.

Desde ahí enfilamos hacia el casco antiguo, pasando por varias calles con encanto, catedrales, iglesias, conventos... hasta llegar al Arco del Triunfo, la Place Royale du Peirou y el acueducto romano.



Llegados aquí, el calor se hacía insoportable, así que nos refugiamos al norte en un parque frondoso bastante grande, le Jardin des Plantes. Un parque con gran variedad de plantas y especies exóticas.

Se hacía tarde y tocaba descansar Una cenita hecha con el hornillo en las mesas que había fuera del hotel y a dormir!

sábado, 7 de junio de 2014

Ruta Costa Azul y Provenza: Presentación

Llegamos al 2014, y tocaba empezar a pensar en las vacaciones de verano. Después de hablarlo con mi pareja, decidimos realizar un viaje en moto. El destino aproximado estaba claro, se trataba de realizar un viaje por la Costa Azul. Antes de empezar con la planificación revisé varios Blogs de viaje con rutas varias por la Costa Azul. Lo que se extrae es que la ruta turística por la costa tiene poco juego, ya que hay muchos puntos de obligado paso, mientras que el realizar incursiones por el interior da mucho más de sí, y es ahí donde hay mayor número de posibilidades.

El viaje que se decidió trataba de en unos 15 días visitar toda la costa Sur Francesa hasta la frontera italiana, para luego volver por el interior. En concreto, la zona de acción sería los Departamentos de Bouches-du-Rhône, Var, Alpes-Maritimes, Alpes-de-Haute-Provence y Vaucluse.


El recorrido aproximado quedaría así para la ida:


El trayecto para la vuelta, más o menos así:


Como se puede ver, el trayecto de ida trata de llegar a Menton bordeando toda la Costa Francesa. Entrando a Francia desde Portbou y recurriendo únicamente a carreteras Nacionales, pasando por el máximo número de pueblos.

La vuelta es algo más compleja, en concreto las incursiones que se hacen a los Alpes Marítimos y Alpes de Alta Provenza. Trata de hacer tres puertos de Montaña localizados en el parque de Mercantour (Col de la Bonette, el cuarto más alto de Europa... Col de la Cayolle y Col d'Allos), recorrer el parque Natural de Verdon, seguir por alguna de las múltiples rutas de la lavanda (aprovechando que justamente en las fechas barajadas la lavanda está en floración), visitar Avignon... luego una vuelta rápida por Autopista, aunque cogiendo un pequeño desvío a Andorra. La ruta es de 3000 Km contando ida y vuelta (que se alargarán como veremos, por incursiones turísticas a algunas zonas). Luego se profundizará en cada tramo diario.

A partir de aquí se va a describir cómo abordamos el viaje a nivel logístico, alojamiento, comida, qué llevamos... espero que esto ayude a los que lean esto para coger ideas para sus viajes, o a tomar en cuenta ciertos detalles que muchas veces pasan desapercibidos.

ALOJAMIENTO:
Evaluando el tiempo destinado para el viaje (nada más y nada menos que 15 días), había que cuadrar bien los alojamientos. Aunque la idea inicial era hacer uso de tienda de campaña, lo desestimamos. Aunque se usen materiales compresibles, una tienda compacta, etc. al viajar dos personas el espacio que ocupa el Kit de Camping no es asumible, más si se pretende hacer tanto turismo. Así que finalmente el viaje se organizó con alojamiento en Hoteles económicos, en la mayoría de casos de la cadena Hotel F1. Como no somos demasiado sibaritas no era problema. Son Hoteles prácticos, siempre hay un recinto con parking (exterior, pero en el Hotel), no hay duchas ni WC en las habitaciones, pero tampoco es problema. En algunos casos fue necesario recurrir a otros hoteles, normalmente por no encontrar en localizaciones concretas... pero siempre con la premisa de precios económicos.

COMIDA:
A la hora de calcular el coste del viaje, notamos que el elemento más a tener en cuenta era precisamente las comidas. Comer y cenar cada día en bares/restaurantes salía muy caro, demasiado para el tipo de viaje que acaecía, y el presupuesto disponible. Por ello se decidió llevar algunos utensilios de cocina, una mini-nevera isotérmica, fogón... y a cocinar! A menos que nos encontráramos en un pueblo haciendo turismo (y entonces sí que aprovechas para comer en él, por practicidad), intentamos dentro de lo posible hacernos la comida, comprando en supermercados.¡ Eso abarataba enormemente los gastos!

LOGÍSTICA:
Tanto por practicidad, como por el estar cocinando nosotros mismos, intentamos concentrar los alojamientos para poder estar 2/3 días en mismo hotel, eso nos permitiría poder descargar cada vez los bártulos y luego movernos más cómodamente sin todo... con la tranquilidad de tener toda la carga a buen recaudo en el hotel. Eso permitía además poder hacer acopio de comida para 2/3 días cada vez, reduciendo las visitas al supermercado al máximo. En general y a menos que se esté llevando a cabo un viaje basado en ruta en moto itinerante (entonces cada día se parte hacia un nuevo destino), para un viaje en moto de corte turístico lo mejor es permanecer en la medida de lo posible unos pocos días en el mismo alojamiento. El equipaje en moto es más difícil de gestionar. Esto cobra mayor importancia cuando se viaja a dúo en la misma moto, porque entonces sí que se lleva mucho equipaje que luego cuesta moverlo, o tenerlo a buen recaudo. También la ropa de moto, la cual no contemplas almacenar porque la llevas puesta, pero para hacer turismo es un incordio (sobre todo en verano) y lo mejor es poder dejarla en algún lugar.

PREPARANDO EL VIAJE:
Para la preparación del viaje hicimos uso de un libro comprado, el cual nos dio muchas ideas. Ha sido un buen apoyo, ya que contenía información tanto de ciudades y sus monumentos, como de pueblos con encanto, además de aconsejar rutas turísticas y con alto contenido paisajístico. También nos hemos apoyado en crónicas moteras encontradas en Internet, muy útiles y con mucho material!

Al lío, para el viaje hemos recurrida a mi tan querida Kawasaki Versys 650. Un pequeño hierro, pero que permite cargarla hasta las trancas, necesita poco mantenimiento y consume bastante poco. La tengo bien equipada para rutear, con:
  • Maletas laterales Givi V35 (35Litros cada maleta).
  • Baúl Trasero Givi V46 (46 litros). Además consta de una baca.
  • Bolsa sobredepósito Givi con sistema TankLock (25 litros).
  • bolsa Waterproof de 40 litros, para colocar en la baca del Top Case.
Además tengo soporte para GPS, con una funda y un GPS TomTom de coche, tuvimos asistencia todo el viaje. También tengo toma de mechero, así que pudimos tenerlo funcionando prácticamente todo el viaje. Por supuesto, con mapas Europa y los itinerarios precargados para no perdernos.

En cuanto al equipaje, esto es aproximadamente lo que llevamos:

Maleta lateral izquierda: mi ropa, se calcula más o menos ropa medio viaje, tirando de lavandería a mitad:
  • Ropa interior
  • Calcetines.
  • 2 pantalones largos.
  • 1 pantalón corto.
  • Camisetas.
  • Sudadera.
  • Ropa térmica (camisetas, sudadera...).
  • 2 toallas (una de baño y otra para la playa), de microfibra para que ocupe poco.
  • Gafas de recambio! Imaginad a medio viaje que haya un percance...
  • Gorra.
  • Bañador.

Maleta lateral derecha: la ropa de mi pareja:
  • Ropa interior.
  • Calcetines.
  • Pantalones.
  • Vestidos.
  • Camisetas.
  • Ropa térmica (camisetas, sudadera...).
  • 2 toallas (igual, una de baño y otra de playa), de microfibra.
  • Secador de pelo compacto.
  • Bikini.
  • Otros.

Baúl trasero:
  • Neverita isotérmica pequeña, para meter víveres.
  • Kit de sartenes del Decathlon, muy útil. Son dos módulos que al abrirlos uno es una olla y lo otro una sartén... dentro hay platos, tazas...
  • Bombonas de gas y quemador.
  • Papel de cocina.
  • Papel de WC.
  • Platos, cubiertos y tabla de cortar.
  • Un Netbook donde ir descargando las fotos y vídeos del viaje.
  • Crema solar.
  • Neceser.
  • Cargadores varios.


Bolsa waterproof, poco cargada en la medida de lo posible:
  • Zapatos y chanclas.
  • Botellas de agua.
  • Manta de camping.


Bolsa sobredepósito, usada para llevar elementos de acceso rápido... y alguna cosilla más:
  • Kit reparación, con reparapinchazos (mechas y bombonas de CO2), alicates multiusos, bridas, cinta aislante, fusibles, bombilla de recambio, cuerda de nylon...
  • Kit herramientas, con diversas puntas y hexagonales. Aunque llevo las herramientas de la moto, no está de más unas puntas extra para algún tornillo puñetero.
  • Grasa para cadenas.
  • Un cable de embrague de recambio.
  • Cámara de acción y soporte, para rápido acceso.
  • Cámara de fotos.
  • GPS.
  • Guantes de invierno, por si llueve... los de verano puestos.
  • Papel WC
  • Cargadores varios.
  • Mochila plegable.


Además, entre el asiento del pasajero y el baúl, iban puestas 2 sombrillas pequeñas para la playa.

Otras consideraciones a tener en cuenta, fueron:

  • Tener la carta verde del seguro de la moto vigente.
  • Solicitar la tarjeta médica Europea, importante por si es necesario recurrir a los servicios médicos.
Y no mucho más. Ayuda el hecho que nos mantenemos en la Unión Europea, entonces ni pasaporte, ni cambio de moneda, ni nada más! 

Destacar la política de repostaje de combustible. En Francia antiguamente había más problemas para el pago con tarjeta, pero hoy en día aceptan pago con Visa en cualquier gasolinera. Debemos cerciorarnos que con nuestra tarjeta podremos operar en el extranjero, pero nada más. En cuanto a precios, tenemos varias posibilidades... porque en Francia puede haber mucha diferencia de precio de un establecimiento a otro. La primera posibilidad es hacer uso de gasolineras según encontremos. Aquí vamos a pagar una cantidad entre alta y digna del mejor atraco (con variaciones para este viaje entre 1,60 a 1,80€ el litro de 95). La más económica es hacer uso de gasolineras de Centros Comerciales... aquí el problema es que hacemos pago con tarjeta, y se produce un cobro del importe máximo que da de sí el surtidor. Luego de repostar se devuelve la diferencia... pero al ser una transferencia a una cuenta extranjera esto puede tardar (1 semana o algo más), dejándonos sin blanca o sin crédito si usamos una tarjeta de Crédito. No usé esta posibilidad, aunque los precios eran bastante buenos (entre 1,40 y 1,45€ el litro de 95). La tercera propuesta y la más recurrida fue el uso de cadenas low cost (en concreto fuimos asiduos a Total Access). En este caso teníamos gasolineras de bajo coste pero con cobro directo (efectivo o tarjeta, sin problema). Un punto medio bastante decente (entre 1,45 y 1,50 € el litro de 95), con la única limitación de estar situadas en zonas más transitadas (cerca de ciudades, carreteras nacionales...). Pero con una autonomía de 300 Km o más que nos daba la Versys, encontrábamos siempre alguna antes de repostar, muchas veces le echábamos un ojo a alguna cerca de ciudades donde hacíamos turismo.

Pues aquí empieza el viaje. Llenamos con algunos víveres la mininevera, nos equipamos con la cordura y... nos vamos de vacaciones!